La Maestría en Política y Finanzas Energéticas ha sido diseñada específicamente para igualar y abordar esta complejidad. Este programa de un año equipará a los estudiantes con el conocimiento, las ideas críticas y las habilidades prácticas necesarias para comprender y ayudar a dar forma, gestionar y evaluar la política energética, e interpretar y operar dentro de los mercados y las finanzas de la energía.

Esta Maestría en Cambio Climático: Medio Ambiente, Ciencia y Política es única porque aborda el tema desde una perspectiva tanto científica como política, lo que significa que aprenderá más sobre las ciencias físicas aplicadas que son relevantes para las políticas. También es la única maestría en la que puede optar por estudiar el cambio climático con un enfoque en ciencia o políticas, o puede optar por una comprensión más completa de ambas disciplinas.

El objetivo del curso es dotar a los participantes de las aptitudes, conocimientos y experiencia necesarios para desarrollar una carrera profesional de éxito en la gestión sostenible de los recursos medioambientales; pretende contribuir al desarrollo de la política gubernamental y a la recuperación económica mediante la formación de titulados de alta calidad que puedan contribuir a una economía inteligente y acelerar la implantación de tecnologías ecológicas; dada la presión y la competencia por unos recursos limitados, el curso aplica un enfoque basado en pruebas para desarrollar soluciones para todos los usuarios del sistema; los titulados adquieren fluidez técnica en la teoría de las ciencias medioambientales seleccionadas, el desarrollo de políticas, la aplicación y las mejores prácticas.

La amenaza mundial del cambio climático es real y urgente. Adquiera conocimientos sobre los retos del cambio climático en la ciencia y la formulación de políticas con esta titulación multidisciplinar. El cambio climático es sin duda uno de los mayores retos a los que se enfrenta nuestro mundo. A nivel mundial ya vemos algunas de sus consecuencias: un aumento de los fenómenos meteorológicos extremos, la pérdida de tierras habitables y una creciente preocupación por la seguridad alimentaria, la pérdida de especies y las amenazas a la biodiversidad.